Derechos y sociedad
Un banco rechazó préstamos a dos portadores de VIH
En ambos casos, luego de la aprobación del crédito hipotecario, el mismo banco rechazó el préstamo porque su aseguradora no les cubría el seguro de vida. Junto a la Fundación Huésped, las personas iniciaron una demanda contra la entidad bancaria.
Un banco privado decidió dar de baja dos créditos aprobados en enero a dos personas portadoras de VIH. Mediante el patrocinio de la Fundación Huésped, iniciaron una demanda contra la entidad bancaria por incurrir en un acto de discriminación por “daños y perjuicios”. El banco rechazó el préstamo debido a que su aseguradora no les cubría el seguro de vida, manifestando la negativa a “razones objetivas”. “Esto es olvidarse de las resoluciones. Existen recomendaciones específicas acerca de que no se pueden realizar estos estudios ni para los seguros ni para los preocupacionales. Lamentablemente, esto es una contingencia con la que nos seguimos enfrentando permanentemente” sostuvo Kurt Frieder, director ejecutivo de la Fundación Huésped en entrevista con Radio Universidad.
Un hombre de 47 años, cliente del banco hace 25, inició los trámites para adquirir un préstamo a principios de año. Luego de aprobar la solicitud, le pidieron estudios médicos para el seguro de vida, condición marcada como necesaria para el otorgamiento del dinero. Tras negarse a firmar el consentimiento para la realización del test de VIH, el banco le envió un mail donde se le informaba que no le habían aprobado el seguro de vida, motivo por el cual no le darían el crédito. A partir de ese momento, se dirigió a la Fundación para iniciar los trámites contra la entidad (tomando como referencia los mails en donde le informaban que su crédito había sido aprobado). Un episodio similar vivió un hombre de 41 años, que fue rechazado por el mismo banco, a pesar de que había presentado los papeles y le habían aprobado el crédito. En este caso, había firmado el consentimiento y se sometió al estudio exigido por la entidad. Tras los resultados, se enteró de que tenía VIH. Finalmente, el banco le confirmó, un mes más tarde, que no le concederían el préstamo.
En ambos casos lo que se reclama es el cumplimiento de la Resolución Nº 37275 de la Superintendencia de Seguros de la Nación, donde se manifiesta que los pacientes con VIH/SIDA no deben ser excluidos de los planes de seguros de personas. En la misma resolución, queda planteado que las infecciones como consecuencia directa o indirecta del VIH/SIDA no difieren de otro tipo de afecciones a la salud, no existiendo justificación alguna para su consideración como riesgo no cubierto en los Seguros de Personas. Asimismo, en un comunicado se afirma que se podría acusar de “daño punitivo” al banco y la compañía de seguros por tener una “conducta antisocial”. “Hemos recibido distintas denuncias. Conocemos otros casos de gente que, finalmente, resolvió no seguir avanzando sobre el tema. Ante la realización de estudios resolvieron buscar otra alternativa, lo que lleva a suponer que no van a tener una vivienda propia. Por otro lado, los preocupacionales se siguen haciendo a pesar de que también están prohibidos. Estos son los problemas que enfrentamos cuando queremos entender que el VIH/SIDA es una enfermedad prácticamente crónica para aquella persona que no solo accede al tratamiento sino que lo cumple adhiriendo al mismo. Hoy pueden tener una vida plena y la misma calidad que cualquier otro”, sostuvo Frieder.
Con respecto a la labor de la Fundación Huésped, plantean como estrategia la no confrontación para trabajar en diferentes planos. “Como los préstamos hipotecarios son algo reciente, tenemos que denunciarlo para que otros bancos no actúen del mismo modo. Lo que estamos haciendo es intervenir a quienes son las autoridades de aplicación, como puede ser el Estado a partir del INADI, los ministerios que han firmado o la Superintendencia de Seguros. Buscamos presionar para que esto se resuelva pero también buscamos conciliar. Ante una situación así lo primero que hacemos es vincularnos con la empresa que ha tomado esa decisión y con el laboratorio que se ha prestado a hacer algo que está prohibido. Intentamos que el empleador, el laboratorio, la empresa de seguros y el banco entiendan que esto no tiene ningún sentido y que en realidad están forzando una situación legal”, explicó el director ejecutivo de la Fundación Huésped./ AC-FACSO