30º Aniversario FACSO

En el marco del 30º aniversario de la Facultad de Ciencias Sociales (UNICEN), la Decana Lic. Gabriela Gamberini y la Vicedecana Dra María Gutiérrez realizaron un balance de los logros obtenidos y los desafíos a futuro para esta unidad académica.

Por Lisi Batres

“Lo importante es recuperar y poder actualizar todas aquellas acciones que de alguna manera fueron construyendo la facultad. Capitalizar 30 años de historia y que puedan posicionarnos en un aquí y ahora que nos permita pensar a mediano y largo plazo”, detalló la Lic. Gabriela Gamberini, decana de la Facultad de Ciencias Sociales (UNICEN) desde diciembre de 2016. “Lo que estamos haciendo es fortalecer las líneas que ya comenzaron en gestiones anteriores. Pero buscamos en especial poner el foco en los jóvenes investigadores”, explicó la Vicedecana Dra. María Gutiérrez, a cargo de la Secretaría de Investigación y Postgrado, en relación a las políticas vinculadas al área de investigación. En una entrevista conjunta, ambas repasaron los ejes y vínculos con los cuales trabaja la Facultad atendiendo al contexto social, político y económico actual. Además se refirieron a las relaciones con otras unidades académicas y las políticas a implementar pensando en la proyección al mediano plazo.

María Gutiérrez: Las políticas actuales son una continuidad de la gestión anterior. Desde hace algunos años la facultad dio una señal muy clara con respecto a poder fortalecer el eje de la investigación, que es tan importante. Se buscó agrupar los distintos grupos de investigación que fueron emergiendo a lo largo de estos 30 años. Poder fortalecer el eje de la investigación a partir de agruparlos en núcleos fue una bisagra importante en la historia de la facultad, que se produjo de la mano con la creación de la Secretaría de Investigación y Postgrado. Hasta 2010 no existía una secretaría como tal que pudiera concentrar todas las inquietudes y los intereses de los investigadores dentro de la facultad. Con la creación de esa secretaría, la facultad empieza a tener cierta injerencia e influencia en las políticas que se quieren dar como institución.

En este momento lo que estamos haciendo es fortalecer esas líneas que ya comenzaron en gestiones anteriores. Pero buscamos en especial poner el foco en los jóvenes investigadores. Esta gestión tiene un fuerte interés en fortalecer a los estudiantes avanzados a través de las becas y de promover que los distintos grupos convoquen a estudiantes, en sus procesos de escritura de tesis pero que también puede ser un camino de inicio en ese sistema de investigación. La otra política que la Secretaría de Investigación y Postgrado tiene es acompañar, a nivel universidad, a los grupos de investigación a que interactúen entre sí. Es decir que los temas de investigación sean transversales a los grupos de investigación de otras unidades académicas. En este marco, se están llevando a cabo en la universidad una serie de convocatorias y proyectos para financiar este tipo de trabajos. Puntualmente en este momento que se están dando recortes vinculados al presupuesto de la universidad, en el área de ciencia y técnica está pasando algo diferente. En oposición a lo que pasaba históricamente, hay dinero para que la universidad genere sus propias políticas de investigación. En estos dos últimos años se dio esto y como secretaría estamos acompañando el desarrollo interdisciplinario de la universidad.

También trabajamos en promover a que los distintos grupos de investigación se presenten en busca de financiamiento en otros organismos científicos. Ese tipo de evaluaciones externas fortalece a los equipos. Promover que nuestros grupos de investigación salgan a competir en organismos nacionales también es una política que hemos estado tratando de dar en los últimos años y se han conseguido cosas interesantes. De hecho, hay una gran cantidad de grupos que se están presentando en la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica. Lo bueno es que no sólo los grupos consolidados sino también los jóvenes investigadores están explorando esa línea. Por otra parte, las disciplinas de la facultad tienen distinto grado de desarrollo. Por ejemplo, en Arqueología la investigación se trabaja desde primer año y eso está muy fortalecido. Es por eso que otra de nuestras políticas es acompañar a las otras carreras que no tienen un desarrollo en el sistema de investigación tan firme a que puedan insertarse en esa línea.

Otra de las políticas actuales es la Diplomatura Universitaria Superior en Comunicación Pública de la Ciencia, que está radicada en la Secretaría de Investigación y Postgrado y nos interesa poder promover. Es una necesidad que se está dando no sólo en nuestra universidad sino que es una demanda muy grande a nivel nacional. Hemos estados trabajando durante los últimos dos años en promover y fortalecer esa titulación. Por supuesto también estamos acompañando los desarrollos que la facultad ya venía teniendo: la Maestría en Antropología Social y el Doctorado en Arqueología. Seguimos en esa línea apostando a que puedan tener continuidad y sigan creciendo. Puntualmente, en relación a la Maestría, ahora estamos pasando por un proceso de acreditación, lo que también la va a fortalecer como oferta.

M.G.: Las convocatorias actuales de la universidad están apuntando a que al menos haya vínculos entre unidades académicas de la UNICEN. Sin embargo, hay convocatorias que están pidiendo que además haya vinculación con instituciones u otros organismos de la sociedad civil, es decir que no sólo sean facultades. Que de alguna forma son quienes van a recibir los beneficios o los resultados de la generación de ese conocimiento. En investigación siempre se trata de que haya una institución externa de la región que sea la adoptante. Pero actualmente las convocatorias están pensadas para unidades académicas de la universidad. Las metas son poder hacer que estas políticas sean parte de un trabajo diario de la investigación en nuestra facultad, que los docentes investigadores incorporen este eje de la investigación como parte de su trabajo profesional. Estas líneas son metas que a su vez ya en menor o mayor medida hemos venido logrando. Esta es la importancia de continuar algo que se gestó hace algunos años para lograr apostar a las políticas a largo plazo.

Gabriela Gamberini: En relación a pensar una facultad de ciencias sociales y a lo que fue el lema que tratamos de instalar: “Somos presente, pensamos futuro”, tiene que ver con recuperar y poder actualizar todas aquellas acciones que de alguna manera fueron construyendo la facultad. Capitalizar 30 años de historia y que puedan posicionarnos en un aquí y ahora que nos permita pensar a mediano y largo plazo. Lo que hemos querido transmitir son estas políticas de investigación, académicas, de extensión y con todo el desarrollo que desde la administración se lleva adelante para poder sostener estas políticas. Son los ejes que permiten que una institución se proyecte hacia adelante.

En función de las políticas académicas, también es importante poder pensar en la oferta de carreras que la facultad tiene y cómo esa oferta se fue construyendo. Algunas empezaron desde 1988 cuando abrió sus puertas la facultad, otras se incorporaron luego. Hoy nos encontramos consolidando ciertas carreras, revisando el perfil de formación profesional, implementando la reforma de los planes de estudio e incorporando nuevas ofertas. Durante el año 2019 se va a completar la carrera de periodismo, que también conlleva una serie de desafíos que se expresan a través de su diseño curricular. Por ejemplo la constitución de los espacios de prácticas pre-profesionales y los modos de elaboración de los trabajos finales de integración. Constituyen espacios de formación que requieren institucionalmente una serie de acuerdos y trabajo académico en torno a esa implementación.

G. G.: Desde lo académico es importante este proceso que debemos dar de articulación y retroalimentación entre las políticas de investigación y el desarrollo de las carreras para que esos procesos de investigación realmente puedan enriquecer el trabajo en las aulas universitarias. El sentido de los procesos de investigación tiene que ver con llevar adelante el desarrollo de proyectos de extensión pero que esa producción de conocimiento sea capitalizada en el contexto de una aula universitaria. Es otro gran objetivo que tenemos que abordar.

Otra cuestión vinculada con lo académico son los procesos de revisión curricular. Que implican procesos de trabajo al interior de cada cátedra vinculado con la perspectiva de enseñanza, las modalidades de aprendizaje, evaluación y selección bibliográfica. Creo que es necesario que podamos seguir trabajando en este sentido.

El área de educación a distancia es otro de los espacios con gran potencial. Entendemos que nos va a permitir generar una proyección a futuro y que abre un abanico de posibilidades muy importantes en términos de ofertas. Nos permite también flexibilizar las fronteras y los espacios y poder llegar a públicos diversos.

G. G.: En el último tiempo notamos un crecimiento importante respecto de la firma de acuerdos con diferentes espacios locales, regionales, nacionales e internacionales para encuadrar distintos tipos de actividades vinculadas con la investigación hasta para llevar adelante propuestas específicas relacionadas con las prácticas pre-profesionales. Esto es un dato alentador en el sentido de poder proyectarnos en un contexto en que es sumamente importante poder gestar lazos de articulación y vincularnos de manera sociocomunitaria. Por eso la otra línea de la facultad tiene que ver con las políticas de extensión y de transferencia.

Desde este marco hay programas que abordan diferentes temáticas, donde todas se vinculan en sentido amplio con políticas de derechos humanos. Programas con acciones que van desde las propuestas vinculadas con estudios de la mujer, género, diversidad sexual, articulación de la escuela secundaria con la universidad, difusión de la arqueología. Es decir, hay una serie de temas que se desarrollan a través de programas y que también nos llevan a generar articulaciones con diferentes sectores o con otros espacios educativos. De la mano de este proceso buscamos generar instancias que permitan que, como facultad y a través de los desarrollos que se lleven adelante, se pueda formar parte de la agenda pública. Que la facultad se constituya en referencia para poder formar parte, como actor político que es, en el marco del tratamiento de distintas temáticas.

Por otro lado, vinculado con el tema de la administración, creo que el proyecto de facultad tiene que ver con avanzar paulatinamente en procesos de informatización de las distintas actividades que se desarrollan en cada uno de los espacios. Desde la gestión de título hasta un trámite académico. La implementación de todos estos sistemas requiere de capacitaciones, personal y de procesos de aprendizaje que son necesarios y que llevan tiempo.

Atendiendo a este desarrollo de tipo académico y de extensión, la otra apuesta fuerte de la facultad tiene que ver con el programa de medios. Un programa que da cuenta de los distintos lenguajes: radial, gráfico y audiovisual; que también son espacios de enorme proyección tanto hacia el interior de la unidad académica como hacia afuera. Son espacios importantes porque permiten no sólo poder acompañar su desarrollo y consolidación sino también poder generar mayor articulación entre estos espacios y las propuestas de cátedra. Creo que esta retroalimentación también forma parte de nuestros propósitos y que es una impronta de facultad que tiene que ver con espacios posibles para grupos de estudiantes donde se les pueda habilitar posibilidades de generar mayores procesos de formación teóricos y prácticos.

También explorar, y este año hemos dado pasos en ese sentido, todo el circuito cultural que se materializa a través de la creación del Centro Cultural Universitario. Un proyecto que viene de larga data y que este año logró materializarse. En este sentido también es otro ámbito posible de desarrollo, proyección e inserción comunitaria para la facultad. Finalmente el otro punto tiene que ver con seguir trabajando fuertemente en la gestación de políticas de promoción que lleven a que más estudiantes elijan esta facultad para llevar adelante sus estudios a nivel local, regional y nacional.

G.G.: El rol de las ciencias sociales en su conjunto es un rol preponderante que tiene que generar la posibilidad de brindar herramientas para analizar los procesos socioeconómicos políticos imperantes. Que desde una concepción crítica pueda no sólo analizar esos procesos sino también ser generador de alternativas y de transformación. Ese es un gran desafío para las ciencias sociales porque estamos en un tiempo histórico donde mucho del desarrollo de estas ciencias es propio de funcionamientos sociales del siglo XX y las sociedades del siglo XXI generan otras dinámicas sociales. Aparecen nuevas problemáticas y muchas veces las categorías teóricas desde las cuales pensábamos el funcionamiento social, hoy son insuficientes y son necesarias nuevas miradas para poder dar cuenta de procesos complejos y diversos. A su vez en todos los casos se requiere de una visión crítica, transformadora y constructiva de la realidad. Es decir que haya propuestas y alternativas atendiendo a la diversidad, a la importancia de la palabra como herramienta de transformación. También poniéndola en el contexto de una universidad pública, regional y gratuita que va gestando acciones todos los días y que desde ese lugar estamos convencidas de que es necesario defender y fortalecer aún en contextos de adversidad.

M. G.: Desde la investigación me parece que es un momento clave para, nosotros como ciencias sociales, intervenir y apropiarnos de estas convocatorias que mencionamos donde la universidad ha definido claramente que sus políticas de investigación tienen que ser de alto impacto regional, atendiendo la demanda de la región. Es el momento para que nosotros como cientistas sociales recurramos a estas convocatorias y nos hagamos protagonistas de esas políticas.

G. G.: Desde extensión también hay una perspectiva que está vinculada justamente con esa producción de saberes. Que encuentren a diferentes personas, de diferentes contextos, trabajando en líneas de determinados proyectos y que eso pueda ser capitalizado también al interior de los procesos formativos de las carreras de grado. Hay objetivos y proyecciones para pensar en términos de la producción de saberes en torno a estas prácticas sociocomunitarias y también dan cuenta de que ese conocimiento que se produce se tiene que ir construyendo entre diferentes personas y tiene que ser compartido. La universidad ya no es la única poseedora de un saber determinado sino que puede construir conocimiento con otros actores y, en ese encuentro, se pueden habilitar los espacios de formación, de desarrollo y de futuro./ AC-FACSO