La deportista que es figura a nivel Nacional

Paloma Routaboul, presente y futuro del vóley

Con solo 16 años ya forma parte de la selección Nacional. Y no solo esto, es capitana o subcapitana dependiendo la categoría. La joven promesa ya es una realidad. Paloma Routaboul analiza su actividad en el deporte y sus motivaciones.

Tomás Kessler- Agencia Comunica

Torneos con su club. Concentraciones y participaciones con la selección Nacional. Tiempo de familia, amigas, sus obligaciones escolares y deportivas (que son muchas). Entre medio de esto, tantos viajes y competencias, ella encuentra un espacio para este diálogo. Predispuesta a cada pregunta y con una sonrisa constante repasó sus inicios y su presente, planteó objetivos, destacó el apoyo fundamental de su familia y mucho más.

Con solo 16 años ha recorrido muchos lugares de la mano del vóley. Deporte que practica desde sus ocho y en el que se encuentra atravesando un momento único. Se trata de Paloma Routaboul, jugadora local que ha tenido múltiples participaciones en las selecciones juveniles y representa a su club y su ciudad a nivel Nacional.

La pasión por este deporte viene de familia. Desde temprana edad acompañaba a su madre al CEF N° 124 donde ella practicaba. Y allí fueron sus primeros pasos. De manera recreativa, jugando como una niña sin saber el camino que le esperaba por delante. "Un día empecé y de ahí en adelante creo que no paré ningún año", recuerda. Dicho CEF y Pueblo Nuevo fueron sus lugares de inicio hasta llegar finalmente a su club actual: Estudiantes.

Paloma ha integrado equipos juveniles de la selección Nacional en diversas ocasiones. Sin embargo, el primer contacto fue un tanto inédito. En cuarentena, a través de zoom, se reunió con el cuerpo técnico y sus futuras compañeras.

Routaboul junto a sus compañeras en un compromiso con la selección

-¿Cómo fue que te avisaron por primera vez de la citación a la selección?

-La primera vez que me llamaron fue en 2020, en plena pandemia. Ahí hice zoom, estuve bastante tiempo entrenando y concentrado de esa manera hasta que en septiembre de 2021 finalmente tuve la primera concentración presencial.

Los dirigentes a cargo de la selección de jugadoras para los equipos nacionales de las categorías juveniles ya tenían el contacto con la joven olavarriense. Durante las copas que ella disputó con su club, la vieron y fue anotada en una lista con sus datos.

-Me acuerdo que me enteré de todo una mañana cuando me desperté, (en época de cuarentena me despertaba re tarde, confiesa con una carcajada inevitable). Desperté y ese mensaje fue como un shock, no me lo esperaba. Lo primero que hice fue levantarme y correr para avisar a mis papas porque estaba re feliz. Creo que fue la vez que más rápido me levanté en mi vida (culmina la anécdota de ese momento único con una visible emoción).

-¿Y los entrenamientos por zoom cómo eran?

-En ese tiempo hacíamos todos ejercicios físicos y algunas cuestiones técnicas para pulir temas del bloqueo y los pasos a realizar. Yo hacía todo en el living de mi casa y me chocaba todas las cosas (recuerda entre risas) pero fue una hermosa experiencia.

De esta manera comenzó un camino plagado de nuevas vivencias y relaciones en el deporte. Toda una vida nueva prácticamente ya que ahora debía combinar su vida personal y deportiva con las responsabilidades y obligaciones de la selección nacional.

-¿Fue complicado el proceso de llegar a las concentraciones, entablar relaciones y acostumbrarte a toda esta "nueva vida"?

-Quizás el llegar fue lo más complicado. Cuando fui al CENARD por primera vez, mis papás no podían entrar, sólo podía pasar yo. Entonces fue como encontrarme con una tensión de estar en un lugar nuevo, no estar acostumbrada y encontrar todo un mundo que no conocía. A las chicas no las conocía y tampoco conocía a nadie del cuerpo técnico, pero por suerte hice amistades rápido que siguen hasta el día de hoy.

San Luis, Lezama, Bolivia y el propio Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (CENARD) han sido algunos de los lugares en que se ha concentrado junto a sus compañeras de cara a las competencias. El último torneo disputado fue el sudamericano U19 en Bolivia. Paloma fue la subcapitana del equipo que se consagró campeón invicto y logró la clasificación al mundial del próximo año. Previamente había sido capitana en la categoría U14

"Las Panteritas", campeonas sudamericanas con presencia olavarriense

-¿Por qué crees que te eligieron como capitana y subcapitana?

-Yo creo que es porque soy bastante organizada, me comunico bien con las chicas y tengo buen trato con todas. Aparte tenía confianza con los entrenadores entonces eso también influyó. Fui capitana cuando era mi categoría que es 2006, pero cuando pasó a ser 2006/2005, pasé a ser subcapitana.

Fuera de la cancha

Cabe destacar que más allá de toda su actividad deportiva, Paloma es estudiante de nivel secundario, se encuentra en el cuarto año en la Escuela Cristiana Evangélica Argentina (ECEA). Muchas veces, ordenar su vida entre estudio y deporte, es algo complicado.

- Siempre cuando voy a las concentraciones me llevo las cosas de la escuela... las llevo pero que las haga es otra cosa. Cuando fui a Bolivia, fue la primera vez que no le di bola a la escuela, me focalicé de lleno en el voley y bueno, cuando llegué se me vino todo de golpe pero ahora ya me acomodé.

-Las faltas no se cuentan. Está todo hablado con los profesores, están al tanto de la situación y me apoyan. Pero cuando llego, de todas formas me tienen que evaluar. Estudiar tengo que estudiar igual (expresa entre risas)

El tiempo libre cuando está en la ciudad es escaso. Lo mismo pasa en las concentraciones donde prácticamente todo se dedica a la práctica y al perfeccionamiento en el deporte. Los pocos lapsos de ocio son invertidos en descanso o alimentación de cara al próximo entrenamiento. En su hogar, aprovecha para estar con su familia y amigas, ya que entre viajes, entrenamientos y tantas competencias, es difícil encontrar lugar para compartir junto a ellas.

Hace poco más de un mes, una gigantografía de Paloma junto a Emily Burgos -otra deportista que representa a la ciudad en la Selección de Softbol- fue colocada en la portada principal del club bataraz.

-Verlo en persona fue algo hermoso. Si bien ya sabía para qué era la foto porque cuando me la sacaron me tuvieron que avisar, estar ahí es otra cosa. Me emociona y me pone muy contenta que desde el club me tengan tan en cuenta y hagan este tipo de reconocimientos.

Paloma y Emily, reconocidas en su club.

La voleibolista, a cada lugar que va, siempre cuenta con un apoyo incondicional. Son su motor, quienes siempre la empujan a seguir e ir por más: Sus padres.

-Siempre están ahí. Para todo y de la manera que sea, ellos se las arreglan para estar. Ya sea en la cancha, o en las transmisiones, se que me miran y me apoyan en todo momento. Recuerdo que jugué la liga de verano con la selección y literalmente (dice estas palabras con mucho énfasis destacando enormemente a sus padres) no hubo un partido al que no hayan ido. Fueron a San Luis, Santa Fé y así a todos los partidos.

Un sueño mundial

Luego de su participación en la Liga Argentina, el torneo sudamericano jugado en Bolivia y tantas concentraciones, Routaboul tiene un gran objetivo que persigue actualmente: el Mundial 2023. Junto a su equipo, lograron clasificarse luego de consagrarse campeonas sudamericanas y van por más.

-Quiero jugar el mundial U19, ser parte del equipo sería un sueño así que ahora le tengo que seguir metiendo, no puedo negociar nada. Es más complicado llegar a formar parte del plantel pero ese es el objetivo de ahora. Luego quiero seguir creciendo y jugando más partidos de más alto rendimiento.
.
Una joven muy aplicada al deporte y a todas sus responsabilidades. Con objetivos bien marcados y un camino enorme por recorrer. Con el apoyo de su familia, sus amigas y todos sus seres queridos, la joven promesa del vóley local y Nacional busca continuar con su desarrollo profesional y va en busca de nuevos sueños y desafíos.