El siguiente caso que desarrolló la fiscalía en la mañana de la cuarta audiencia de alegatos, fue el de Alcides Félix Díaz quien el 26 de enero de 1978 fue detenido junto a su novia en  25 de Mayo y Alvaro Barros a las 23 horas, cuando volvía de la terminal de ómnibus de Olavarría.

Sobre Díaz, Juan Manuel Portela, en representación del Ministerio Público Fiscal, contó que era conocido militante del Partido Comunista y que ese fue el motivo de su secuestro.

En relación al secuestro, en la audiencia se mencionó que Díaz y su novia fueron detenidos por dos personas de civil que los subieron a un auto y los trasladaron a la comisaría de Olavarría. A ella la liberaron a la hora, él no contó con esa suerte. En la comisaría a él le dijeron que hablaría por las buenas o por las malas, pero "No sería allí a donde hablaría por las malas" lo encapucharon y lo trasladaron en el baúl de un auto rojo al Centro Clandestino La Huerta. Nunca figuró en los libros de detención de la Comisaría de Olavarría, detalló el fiscal.

En Tandil, en el Centro Clandestino fue sometido a varias cruentas sesiones de tortura mediante el paso de corriente eléctrica mientras le preguntaba por sus actividades políticas y gremiales. Su estado de salud se vio deteriorado por las terribles sesiones de torturas, tanto así que le pusieron un médico que lo controlaba, sin embargo esto no impedía que igualmente lo continuarán atacando.

El 24 de febrero de 1978 lo trasladaron a la Comisaría de Olavarría y el 25 de febrero previa firma de un papel recuperó la libertad. En ese entonces el Banco Hipotecario le anuló una adjudicación de una casa.