Notas

El juego, un derecho a cuidar más allá de la pandemia

En el mes de las infancias, profesionales y familias reflexionan acerca de la importancia del derecho al juego, su reconfiguración en pandemia y su relación estrecha con la tecnología.

mes de las infancias



Camila Ale - Agencia Comunica

12/08/2021

Desde el uso de masas, juegos de mesa o ver videos hasta jugar a que se ponen alcohol en gel. Aparecen actividades variadas y muchas veces se relacionan en un principio con las que enviaban las maestras y profesores. Para algunas familias se agotó la creatividad. Para otras, surgieron oportunidades de esparcimiento en familia.

Es por ello que en el mes de la niñez, Malena Chillón, maestra jardinera, Laura Hoffman, coordinadora del Observatorio de Niñez y Adolescencia de la FACSO, Rosario Picazo, psicopedagoga y algunas familias repiensan el derecho al juego en pandemia y el rol de los dispositivos móviles.

“El juego es sumamente importante, es un espacio de disfrute y esparcimiento. Pero al mismo tiempo es un espacio de reelaboración, aprendizaje y vinculación. Hay una edad donde los niños ya no juegan solos, y necesitan de un Otro que los acompañe” describe la Psicopedagoga local Rosario Picazo, y agrega que el juego “ayuda mucho a expresar y elaborar aquello que con su corta edad o capacidad cognitiva no puede".

Entonces, en tiempos de aislamiento aparece la disposición de los adultos a ponerse a jugar también y compartir los mismos espacios de teletrabajo y juego. Es por ello que se reconfiguró la recreación y al mismo tiempo fue el momento de revalorizarla. “Fue complicado marcar un límite entre los tiempos de trabajo y los de esparcimiento. Cuando logramos coordinar las tareas y generar momentos significativos en familia, nos dedicamos a compartir algunos juegos de mesa que adquirimos con la intención de utilizarlos en el <encierro>”, explica Mariángeles, madre y docente.

En la misma línea, Laura Hoffman - Coordinadora del Observatorio de Niñez y Adolescencia de la Facultad de Ciencias Sociales de Olavarría- plantea que “con la pandemia se volvieron a resignificar los juegos tradicionales como la escondida, en casa con tus hijos, y se tuvo que buscar el momento para destinar al juego”. Tal es el caso de la familia López, “en cuarentena tratamos de encontrar momentos para jugar toda la familia después del horario de trabajo, como cartas o pintar”.

Picazo considera que “ha afectado mucho la pandemia al juego. Se ven entre ellos como una posible amenaza, de que <eso malo> que está afectando al mundo está en el otro, y deben cuidarse”. Por esa razón “evitan mucho el contacto visual o físico”, explica la psicopedagoga. “La manera de relacionarse en el juego cambió”, reconoce la maestra jardinera Malena Chillón, y ejemplifica que “hay un caso donde le invitan a jugar, le comparten juguetes o se le acercan, y le da mucha vergüenza o aparece la incomodidad”.

El juego con los cuidadores cobró un rol importante en la pandemia. Y tener a mamá o papá en casa más tiempo fue, para los niños y niñas, una situación atípica a la que rápidamente se acostumbraron. Mariángeles lo relata en una anécdota que muestra la espontaneidad de su hija: “mi nena más chica estaba queriendo charlar conmigo y yo estaba planificando o corrigiendo en la computadora. Me pregunta entonces, sacándome charla, qué haría yo si fuera ella. Yo le respondo y le devuelvo el interrogante. Y ella, sin dudarlo, me dijo: renunciaría al trabajo”.

La tecnología, hoy una “salvación”

Por otro lado, aparecen otros cambios, todas las familias consultadas coinciden que siempre han criticado el uso de los dispositivos tecnológicos en los más pequeños, sin embargo no les quedó otra, es una salvación. “Optamos por empezar a dejarlo más rato mirando la televisión, cosa que siempre estuve en contra de que a tan corta edad estén prendidos a la pantalla, pero por momentos servía y mucho” explica Virginia, madre de dos.

La familia López agrega que “usan tanto la tecnología que a veces no podemos poner límites, saben utilizar todos los dispositivos mejor que nosotros.” Para Chillon hay una explicación: “se generó una aceleración en el aprendizaje y ahora pueden prestar atención en muchas cosas a la vez”. Sin embargo los niños “se aburren más fácil, tenemos que planificar cada vez más juegos y con menor tiempo. Observamos que hay actividades que a veces no funcionan porque tienen otro tipo de estimulación”.

Existe aún una puja entre las tecnologías y los juegos al aire libre (para un real esparcimiento). “En nuestro patio nos dedicamos a cuidar las plantas y también aprovechamos las actividades del jardín que apuntaban al juego en la elaboración de papel reciclado y cuidado de brotes. En cambio, la opción más atractiva para la más pequeña fue la aplicación Tik Tok, se divirtió mucho grabando videos”, comparte Mariángeles.

“El aislamiento volcó mucho a los niños en juegos de computadoras, los cuales son sumamente violentos como el Among Us, además aparecen relaciones de "novios" por medio de roblox u otras redes, desde muy chiquitos” especifica la Psicopedagoga Rosario Picazo.

Por último, la profesional del aprendizaje concluye que "una computadora nunca es un lugar seguro, aunque esté en nuestra casa”. A pesar de ello la pandemia nos obligó a eso y “somos los adultos los responsables de mediar en esos espacios”, acompañarlos y cuídar su derecho al juego. En ese acompañamiento, la docente de nivel inicial Malena Chillón reflexiona que "todavía veo que las infancias tienen ese interés por las actividades al aire libre, y sobre todo de seguir jugando”, más allá de la pandemia. (Facso - Agencia Comunica)