Notas

Relevamiento de condiciones de vida y hábitat del barrio “La Movediza"

La Facultad de Ciencias Humanas presentó y puso a disposición de la comunidad el primer informe del “Relevamiento de Condiciones de Vida y Hábitat del Barrio “La Movediza” de la Ciudad de Tandil”. El informe ofrece un balance sobre las desigualdades sociales y urbanas del barrio.

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Soledad Restivo - Especial desde Tandil

La Movediza es uno de los barrios que más ha crecido en la ciudad de Tandil en la última década, con una urbanización irregular, escasa infraestructura social y acceso a los servicios básicos. Una de las preocupaciones más importantes se relaciona con las problemáticas habitacionales, sobre todo en lo que concierne a los sectores de menores ingresos y mayor vulnerabilidad de derechos urbanos y sociales en general. Es en este marco que las instituciones y organizaciones sociales del barrio, nucleadas mayoritariamente en la Mesa de Barrial Institucional, acercaron la demanda de trabajo conjunto a la Secretaría de Investigación y Posgrado de la Facultad de Ciencias Humanas.

Por eso es que se llevó a cabo el primer informe del “Relevamiento de Condiciones de Vida y Hábitat del Barrio, a cargo del Mg. Gabriel Álvarez que dirigió el equipo de investigadores e investigadoras compuesto por el Dr. Álvaro Álvarez, la Lic. Melina Fernández, el Lic. Guillermo Porcellana y la Lic. María Paula Vecino. Con una metodología de investigación y acción participativa, el proyecto involucró a gran cantidad de organizaciones, colectivos y vecinxs, docentes y estudiantes. Este trabajo se realizó de manera colaborativa con trabajadores y trabajadoras de la salud, docentes, trabajadoras sociales y operadoras comunitarias, quienes además se hicieron cargo centralmente de hacer efectivo el relevamiento.

El diagnóstico previo realzó la necesidad de tener datos actualizados en relación a las condiciones de vida y hábitat de las vecinas y vecinos del barrio, para atender de manera conjunta e integral a las demandas sociales y urbanas. Se tomaron en cuenta dimensiones como el mundo del trabajo, las viviendas deficitarias y la cuestión urbana. También se sondearon aspectos relevantes de la salud de lxs vecinxs, acceso a la educación y alfabetización, desarrollo social y seguridad social. Los datos fueron sistematizados partir de un sistema que armó un técnico de la Facultad de Ciencias Exactas.

En diálogo con esta cronista, lxs investigadores dieron detalles sobre el proyecto y aseguraron que el objetivo principal fue construir “datos concretos, objetivos y actualizados sobre las condiciones de vida de las barriadas”. Los y las investigadores/as destacaron que en este informe se incluyen de “resultados preliminares que invitan a seguir construyéndolos, pero que permiten tomar decisiones y formular política pública”. El Dr. Alvaro Alvarez comentó que el relevamiento emerge desde “abajo e intenta dar respuesta a la necesidad de quienes trabajan en el barrio”, al tiempo que destacó la conformación interdisciplinar y el rol de la universidad pública para formular herramientas necesarias para las comunidades.

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Uno de los objetivos específicos del proyecto es ofrecer informes específicos y disponer de una herramienta que pueda ser actualizada con periodicidad de acuerdo a dinámica barrial y demográfica. Resulta novedosa la posibilidad de que los datos sean georeferenciados para poder evaluar su distribución geográfica. La cuarta etapa y final de este trabajo, aun está en curso, y es la sistematización de los datos obtenidos y la elaboración del informe final con los correspondientes gráficos y mapeos.

En las reflexiones, el informe dice que “las políticas urbanas imbuidas de las demandas ciudadanas sobre el espacio urbano y el derecho a la ciudad deberán contribuir a un mayor disfrute de la condición urbana y el derecho a la ciudad para todxs”.

Vale recordar que Naciones Unidas reconoce el derecho a la ciudad y lo define como el “usufructo equitativo de las ciudades dentro de los principios de sustentabilidad, democracia, equidad y justicia social. Es un derecho colectivo de los habitantes de las ciudades, en especial de los grupos vulnerables y desfavorecidos, que les confiere legitimidad de acción y de organización, basado en sus usos y costumbres, con el objetivo de alcanzar el pleno ejercicio del derecho a la libre autodeterminación y un nivel de vida adecuado”. Desde esta perspectiva, el acceso al hábitat urbano requiere un abordaje integral, como problema y objeto de investigación multidisciplinar. Y así lo han entendido les cientificxs de la Facultad de Ciencias humanas que participaron del “Relevamiento de Condiciones de Vida y Hábitat del Barrio “La Movediza” de la Ciudad de Tandil”. Ahora es momento de los gobiernos y sus políticas.