Ciencia

El agua: un recurso que de ilimitado no tiene nada

La importancia de ser consciente de la relevancia del agua y de generar un uso racional. Emanuel Laportilla Subgerente de Obras Sanitarias de Coopelectric informó sobre diversas situaciones en localidades del partido y la problemática del arsénico.

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Jorgelina  Rivulgo-  Agencia Comunica.

01/08/2023.

 Ahora, primero un paréntesis antes de avanzar. ¿Qué es la salinidad? y ¿qué es el arsénico?. La primera pregunta se responde al hacer referencia a las sales minerales que se encuentran disueltas en el agua, mientras que el arsénico es un metal. Este último es un elemento que puede encontrarse en la corteza terrestre que tiene la capacidad de afectar el agua subterránea, no es apto para el consumo y de ingerirse puede tener graves consecuencias.

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Planta de Osmosis. Fuente: Olavarria Municipio.

Emanuel Laportilla explicó incluso que localidades del partido manifiestan la siguiente problemática: “en Espigas el agua tiene altos niveles de arsénico que para el consumo es malo, por lo tanto hay que tratarla, nosotros tenemos una planta de osmosis instalada en la localidad”. La planta de osmosis cumple la función de permitir el paso del agua sin las especies disueltas que se encuentren y para esto, se utilizan unas membranas semipermeables.

Se aplica el uso de una planta de osmosis como respuesta al arsénico, pero el Subgerente de Obras Sanitarias manifestó que “se está empezando a implementar en pequeñas localidades de la provincia, una cañería para el consumo -cocina- y otra para el uso de higiene -lavado de ropa, ducha, inodoro-”. Aunque, si bien es una alternativa, la misma aún no es viable en ciudades grandes debido a que “no es factible cambiar miles de kilómetros de cañería”. Además, mencionó la problemática de Espigas debido a que es parte de la concesión de Coopelectric pero que localidades como “Recalde y todo el norte del partido de Olavarría que limita con Bolívar tiene problemas de salinidad de agua”.

El agua, en palabras de Emmanuel, es “un recurso muy económico” y afirma que llegará un momento en el cual se volverá mucho más limitado y “tendrá que aumentar los costos y afectará directamente al usuario”. En temporadas de mucho calor las piletas se llenan con agua potable y al ensuciarse se desecha y se vuelve a llenar, sucesivamente. Por esto, menciona como alternativa el uso de productos específicos y determinadas herramientas que logren mantener el agua limpia para no derrochar.

¿Es necesario irse a la situación de un país limítrofe?

El ingeniero fue claro al explicar que se debe hacer un uso racional del agua, “porque estamos teniendo efectos adversos que no son de hoy sino que ya viene sucediendo año tras año, producto de sequías”. Para lograr el uso racional, se ha implementado un sistema de micromedición que son medidores en cada domicilio.

Lo cual tuvo un efecto positivo, previo a que se implementara el sistema de medidores “estábamos en un consumo de 400 litros de agua por habitante, ahora eso se redujo a la mitad y la cifra es de 200 litros de agua por habitante”. Los efectos climáticos representan una adversidad y esto se debe a que “todo lo que sea captación del agua a través de un recurso natural de una fuente superficial” ha sufrido sus consecuencias, como las localidades que están sobre el Río Paraná que sufrieron la bajante del río y las tomas de captación del agua se vieron perjudicadas.

En el caso de la ciudad de Olavarría se cuenta con 49 pozos de captación de agua subterráneas pero la sequía ha perjudicado porque “años anteriores un pozo nos rendía al 100% y ahora se ha reducido el rendimiento a un 75%”, manifestó Emanuel Laportilla.

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Planta depuradora. Fuente: EnLineaNoticias.

La particularidad que atraviesa Uruguay es que se encuentran más cerca del océano y tiene un problema para la toma de agua a través del río de La Plata, porque “ese río se encuentra más salinizado que el sector donde está ubicado Buenos Aires”. Por ende, al ocurrir esa problemática de “no poder tomar agua de un lugar, te limitará de otro, entonces también tiene un gasto económico y cada vez se encarece más poder tener agua potable”, reflexionó el ingeniero civil.

Por otra parte, Laportilla habló sobre la importancia de la concientización y que “hay que trabajar más sobre eso”. Es fundamental porque “nos estamos dando cuenta que por efectos del clima ya no es un recurso ilimitado”. Por último, concluyó que “habría que concientizar un poco más”, un recurso que no se toma dimensión de la importancia porque todos los días se abre la canilla y tenemos la suerte de tener agua, pero si no se cuida habrá consecuencias y en el mejor de los casos, sería económica.