Dos días para reivindicar el derecho al juego

María José García – Agencia Comunica

27/05/2022

Hoy pintaron rayuelas y juegos sobre la plaza central. Mañana cortarán la calle para que niños y niñas concreten lo que más les gusta hacer: jugar. Hoy más de cien adolescentes de ENAPE y del Programa Envión 1 participaron de las pintadas junto a sus docentes.
Ese es el objetivo de dos días de actividades: reivindicar el derecho al juego. La dinámica forma parte del programa "Infancias, juventudes y derechos", que está dirigido por la Dra. Silvia Fernández Soto, de la Facultad de Ciencias Humanas y co-dirigido por la Prof. Laura Hoffmann, de la Facultad de Ciencias Sociales.
También forma parte de la iniciativa María Emilia Vales, Licenciada en Trabajo Social, coordinadora del Programa Envion 1 y partícipe del Programa Infancias y Juventudes de la Facultad de Ciencias Humanas de la UNICEN.

Y es, precisamente, en el marco de este último espacio que presentaron una convocatoria de Extensión para crear el Programa Integral sobre Infancias, Juventudes y Derechos, aprobado en diciembre, y que tiene los objetivos de “tener un alcance regional y la posibilidad de crear espacios de conversatorios sobre los derechos de las infancias y las juventudes, que es una temática nueva en el ámbito de la universidad”, cuenta María Emilia Vales.
La metodología del Programa “tiene que ver con la construcción de mesas de diálogo que tomen cada uno de los derechos y que, en dicho intercambio, incluyan las diferentes voces que atraviesan la temática de las infancias: desde las instituciones, los organismos de protección del Estado, les docentes, les investigadores, hasta las propias niñeces y adolescencias, con el objetivo de ver cuáles son las problemáticas y las necesidades existentes”, detalla Laura Hoffmann y añade: “Porque los derechos se garantizan desde las prácticas, y estas involucran a todes de una forma co-responsable y colectiva”.
A su vez, el Observatorio de la Niñez y Adolescencia participa del Consejo Federal por el Derecho al Juego, formado por más de 20 espacios de todo el país. “Cada actor, en ese Consejo, tiene el interés de empezar a pensar, en el marco de sus ciudades, políticas públicas integrales que garanticen el derecho al juego que, de todos los derechos, es el que menos valorizado está”, cuenta la coordinadora.

En este sentido, “tanto desde Tandil como de Olavarría, se presentaron proyectos de ordenanza para que el 28 de mayo, que es el Día Internacional del Derecho al Juego, se incorpore al calendario municipal anualmente”, cuenta Hoffmann. “El proyecto en Olavarría prevé el armado de una comisión de trabajo qué garantice que todas las últimas semanas de mayo, haya actividades en relación a la promoción del derecho a jugar”, especifica.
En cuanto a las actividades de esta semana, “desde el año pasado comenzamos a incursionar en lo que es el derecho al juego. Y es la primera vez que se logran articular las sedes para pensar propuestas que respeten las particularidades, las necesidades y los intereses de cada ciudad”, cuenta la Lic. Vales. “Las distintas propuestas de actividades, además, se van a hacer en simultáneo en Olavarría, Tandil y Azul. Es decir, en el mismo día y a la misma hora".
Las actividades tienen el interés de lograr que las infancias y juventudes de cada ciudad dediquen un momento de su jornada a celebrar, jugando en el espacio público, el derecho al juego, con invitación abierta al público: desde actividades lúdicas y recreativas en las distintas instituciones, hasta intervenciones artísticas y juegos en la calle.
“Fue un trabajo arduo, porque terminamos haciendo una propuesta muy ambiciosa y novedosa”, comparte Vales. “Novedosa en el sentido integral de que abarca a las tres sedes de la UNICEN y también en el sentido de que genera un impacto local porque, de repente, vamos a tener las calles cortadas con niñes pintando juegos, haciendo murga o jugando”.

Lo cierto es que ha habido en la ciudad otros momentos en los que se ha tomado la calle para otras cosas, pero para jugar sería la primera vez. “Está bueno tomar el espacio público y reivindicarlo como un espacio en el que las infancias puedan estar y hacer uso y disfrute de su derecho a jugar”, afirma la profesora Hoffman.
Al mismo tiempo, “la calle tiene esta cuestión simbólica de que es el espacio en el que no pueden habitar las infancias. Entonces, es una clase de llamado de atención para les adultes, con la reflexión sobre qué espacio les estamos dejando a les niñes para hacer uso de ese derecho a jugar”, concluye.
Finalmente, estas actividades sirven para demostrar que “para garantizar el derecho a jugar no basta con tener espacios públicos, son necesarias propuestas. Y para esas propuestas es necesario sentarnos a dialogar en conjunto y no necesariamente poseer de mucho presupuesto”, acuerdan Vales y Hoffmann.