Entrevistas


La abogada Mariana Catanzaro reflexiona en el marco de los 40 años de democracia

“Los derechos son conquistas sociales, los tenemos que conservar y cuidar”

La abogada integra la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Argentina y reflexionó sobre la incidencia política, la participación ciudadana para la sanción de leyes y el sistema democrático como estilo de vida.

Mariana Catanzaro
Discurso de Mariana Catanzaro en una sesion realizada en Monte Pelloni. Foto: PortalUrbano.

Jorgelina Rivulgo - Agencia Comunica

4/05/2023

“Los derechos humanos se conquistan, pero además se tienen que consolidar”, asegura la Dra. Mariana Catanzaro, abogada integrante de la Asamblea permanente por los Derechos Humanos. En diálogo con Agencia Comunica, reflexionó sobre la incidencia política y la participación ciudadana en la sanción de leyes, hizo énfasis en el derecho como conquista social y el rol del sistema democrático. Además, planteó la necesidad de separar estado e iglesia.

Muchos fueron los derechos obtenidos luego de la asunción de Alfonsín en el 1983. Claro que no fueron de un día para el otro sino que son el resultado de luchas y manifestaciones que ocurrieron a lo largo de los últimos años y que generaron nuevas leyes, entre ellas: ley de cupo trans, ley de matrimonio igualitario, ley de vih, por mencionar tan solo algunas. En este punto, Mariana Catanzaro definió a los derechos humanos como conquistas sociales, pero bajo la aclaración de que no es una frase propia sino que le pertenece a un docente que formó parte de su trayectoria académica en la Universidad de Madrid. “Los derechos humanos son conquistas de la sociedad que impone una agenda que quizá la clase política no la vive, no la tiene como propia, no la tiene como urgente”, declaró Catanzaro.

Las leyes se sancionan y hay más de 200 tratados que abogan por la defensa de los derechos. ¿Es necesario seguir escribiendo más tratados? A raíz del interrogante es que la letrada afirma que “es una paradoja porque tenemos más de 200 tratados que protegen los derechos humanos y aun así ocurren violaciones sistemáticamente, ya sea por cuestiones políticas -como lo fue durante la última dictadura-, o con colectivos como la minorías sexuales o de cualquier clase. Me parece crucial dar un debate para que esos tratados no queden en letra muerta. Vemos que están muy lindos escritos pero no se implementan y eso sí es una decisión política”.

En los 40 años de democracia se ampliaron y se crearon derechos para tener una pluralidad de voces. Pero Catanzaro reflexionó que también se han derogado leyes, como ocurrió en el 2016 con la ley de medios. “Se han conquistado derechos pero no se han trabajado para mantenerlos. La ley de medios que estaba vigente y que luego fue derogada es un retroceso tremendo porque se conquistó un grupo de derechos para tener pluralidad de voces y se tuvo que volver atrás porque no se pudo conquistar realmente”. He aquí un puntapié central desde donde analizó la democracia porque “el fracaso de distintas áreas del sistema democrático da lugar a ideas que son propias de un sistema dictatorial. Los derechos humanos se conquistan pero además se tienen que consolidar”, y aclara que “la gente se los tiene que apropiar y debe ser escandaloso cuando no se cumplen, porque entonces algo ahí está fallando.”

Trabajo y paridad de género

feminismo
Marcha feminista en Olavarria por el 8M. Foto: Dante Lartirigoyen.

Los derechos laborales han crecido en el periodo democrático pero quedan deudas pendientes. Las cuestiones de género son un eje central en este sentido. Según la Dra Catanzaro, es necesario lograr un consenso general que pueda dar cuenta de que “tanto los sectores de trabajadores y las patronales deberían asumir que tiene el mismo costo emplear a un hombre que a una mujer. Establecer un consenso de este tipo y que el Estado lo avale y lo promueva”.

Además, manifestó el hecho de que si bien se contrata a mujeres, no siempre alcanzan un cargo gerencial, ya sea porque dentro de su carrera es habitual que se las relegue o porque su carrera estuvo interrumpida por un embarazo. Por eso consideró fundamental actualizar las reglas laborales desde una perspectiva de género. Es aquí cuando Catanzaro dice que aún “hay muchísimo para seguir trabajando y consolidar derechos”.

Iglesia y Estado, asunto separado

Estado Laico

En el 2020 se sancionó la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y el principal discurso que se antepuso a su promulgación provino de los sectores religiosos. “En materia de los derechos reproductivos todavía hay escollos que el Estado los quiere tratar y otros que no”. Mariana Catanzaro hizo referencia a la Iglesia Católica. Explicó que la Constitución Argentina establece como religión oficial a la Católica Apostólica Romana y opinó que “no es democrático que toda la sociedad argentina sustente con sus impuestos un único culto”.
Mariana Catanzaro forma parte de la Red de Abogados contra abusos eclesiásticos, desde donde siguió tres causas. Por esto dijo que: “sabés con el asco que pago yo mis impuestos porque sé que parte de eso sirve para sostener a esta gente”.
Frente a ello, es que remarcó la importancia de que el “Estado y la Iglesia tienen que estar separados. El Estado tiene que gobernar y legislar para todos”. Asimismo fue clara y concisa sobre el hecho de que “cada uno tenga su propio dogma, lo que es totalitario es que se prepondera un dogma sobre otro y que el Estado pretenda que todo el mundo sostenga ese culto, me parece totalitario”.

Sistema democrático: un estilo de vida

Cuando Raul Alfonsin asumió la presidencia el 10 de diciembre de 1983 afirmó lo siguiente: “Vamos a establecer definitivamente en la Argentina la democracia que los argentinos queremos. Dinámica, plena de participación y movilización popular. Con la democracia no solo se vota, sino que también se come, se educa y se cura”. La idea sirve para recordar la importancia de vivir en un sistema democractico que no solo implica tener ininterrumpidamente un gobierno ni ir a votar cada cuatro años, sino que también son las políticas públicas con las que se gestiona la educación, el sistema de salud y los derechos humanos en defensa de un bienestar social.
“La democracia es un estilo de vida, en lo cotidiano percibimos que vivimos en un Estado democrático. Cuando se vive en una dictadura lo que decís, lo que pensás y lo que ves, todo eso está condicionado y digitado por un estado que todo pretende controlarlo, cuando vivís en democracia la premisa cambia”, reflexionó la doctora en leyes.
A modo de cierre, Mariana Catanzaro insistió en que la democracia es un estilo de vida, debido a que “es el mejor sistema con el que se puede alcanzar la comida, educación, trabajo y siempre va a ser mejor la proyección y el camino a transitar esos objetivos que en dictadura, donde tendrías infinidad de recortes de otros derechos”.