Notas

Alejandra Pizarnik:una poeta maldita

A 85 años de su nacimiento, recordamos a la escritora argentina

alejandra pizarnik

Magdalena Bisogno Eyler - Agencia Comunica

29/04/2021

Flora Alejandra Pizarnik nació el 29 de abril de 1936, en el barrio de Avellaneda. Hija de inmigrantes ruso - judíos que escaparon del nazismo, desde su infancia tuvo cercanía con la muerte, ya que, parte de las familias Pozharnik y Bromiker murieron dentro de campos de concentración.
Poeta, intelectual, crítica y traductora, durante su adolescencia vivió con el peso de ser comparada con su hermana Myriam, lo que minó su autoestima y se transformó en un elemento más en la constitución de su posterior yo poético.
Inteligente, lectora voraz, si bien ingresó a la Universidad de Buenos Aires para estudiar Filosofía y también incursionó en una Escuela de Periodismo, nunca terminó sus estudios. Allí conoció a autores surrealistas como André Bretón, Tristán Tzara, que la sorprendieron y ejercieron una profunda influencia en ella.Su motivación era leer a cuántos autores pudiera. Uno de sus profesores, Juan Jacobo Bajarlía, la animó a seguir su vocación literaria. En 1955 publicó con sólo diecinueve años La tierra más ajena, un libro de poemas.
Su padre fue una figura muy importante en su vida, quien le costeó la publicación de La última inocencia, en 1956. Además abonó para su terapia con el psicoanalista León Ostrov que le permitió expresarse a través del inconsciente y del surrealismo. El fallecimiento de su progenitor fue muy impactante para ella, la muerte se convirtió en una presencia cada vez más creciente en sus Diarios y sus poesías.
Sin embargo, ni la pintura ni la poesía contribuyeron a mejorar su estado anímico. “En el fondo yo odio la poesía. Es, para mí, una condena a la abstracción. Y además me recuerda esa condena. Y además me recuerda que no puedo "hincar el diente" en lo concreto. Si pudiera hacer orden en mis papeles algo se salvaría. Y en mis lecturas y en mis miserables escritos".

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Pizarnik y Cortázar mantenían una correspondencia fluida

Desde joven utilizó anfetaminas y muy pronto comenzó a consumir otro tipo de drogas. Tomaba pastillas para dormir, para levantarse, para curar el dolor, para afrontar el día a día.
Su preocupación era la literatura en sí misma, especialmente la calidad. Olga Orozco fue una persona central, con la que entabló una relación estrecha y se convirtió en una especie de madre intelectual.
Desde 1960 a 1964 vivió en París, donde trabajó como crítica y traductora. Se movió por círculos intelectuales, artísticos y literarios. Se hizo amiga de Julio Cortázar, Octavio Paz, Ivonne Bordelois.
El 25 de septiembre de 1972, con sólo 36 años, terminó con su vida en su casa en Buenos Aires, después de haber obtenido el permiso para salir del hospital psiquiátrico y de varios intentos anteriores que provocaron su internación para tratar su cuadro depresivo. (FACSO - Agencia Comunica)