En el final del juicio

Caso Moreno: Una sentencia ejemplar

Matías Moreno en el final del juicio. /AC-FACSO

Cadena perpetua para los ex militares, cárcel común para los civiles y pedido de investigación para la empresa  Loma Negra, sospechada por su complicidad con el gobierno de facto. Además se solicitó que se inicie una causa contra  el ex  General Aníbal Verdura y esclarecer la participación de funcionarios de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires en crímenes de lesa humanidad.

En la última jornada por el juicio de la Causa Moreno la alegría y la emoción invadieron las inmediaciones del Aula Magna de la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires, donde el Tribunal dictaminó la sentencia a los acusados. El veredicto en voz del juez Atilio Falcone pudo seguirse desde una pantalla gigante ubicada sobre una de las calles lindantes al edificio del Rectorado. La gran masa de militantes que cantó y tocó sus bombos durante toda la jornada guardó silencio mientras el magistrado dentro de la sala empezó a leer la sentencia. Los primeros gritos se escucharon cuando Falcone dijo que el Tribunal  resolvía por unanimidad condenar a los ex militares Tomassi, Pappalardo y Ojeda a la pena de prisión perpetua. A continuación la tensión aumentó entre el público cuando el juez leyó la sentencia a los acusados civiles: se condenó a Emilio y a Julio Méndez a la pena de 15 y 11 años de prisión respectivamente, por ser ambos partícipes necesarios en el delito de privación ilegal de la libertad agravada e imposición de torturas contra un perseguido político. Fue entonces cuando ya no se pudo escuchar la voz del juez, perdida entre los cantos y comentarios de aprobación por la sentencia. Amigos, familiares y compañeros de la víctima fundieron sus cuerpos en largos abrazos. Luego una frase llamó la atención de los presentes y se escuchó al juez Atilio Falcone afirmar que dada las pruebas surgidas en el juicio, se permitía sospechar que integrantes del directorio de la Cementera Loma Negra habrían inducido los delitos que damnificaron al Dr. Carlos Alberto Moreno, por lo cual pedía que se de inicio a una investigación para comprobar estos hechos.

Este fue uno de los momentos más esperados desde mediados del juicio, cuando se dieron a conocer los informes de la Dirección de Inteligencia de la Policía de la Provincia de Buenos Aires donde se pudo saber que la empresa Loma Negra habría pedido que se infiltraran agentes dentro de la fábrica para investigar a los trabajadores. Ante la sorpresa del público el juez Falcone continuó pidiendo que se investigue el actuar de funcionarios de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires entre los meses de Abril y Mayo de 1977.  También solicitó el inicio de una causa contra el ex General Ignacio Aníbal Verdura por su intervención en los hechos juzgados. Apenas finalizó el comunicado, el comentario general fue que se había escuchado una sentencia ejemplar y que lo que se estaba viviendo era un momento histórico en la lucha por los derechos humanos en Argentina.

Matías y Martín Moreno tomaron la palabra

La alegría llenó las calles de Tandil y volvieron a comenzar los cantos recordando al "Negro" Moreno, mientras que se agitaban las banderas con más fuerza esperando la salida de los familiares que aprovecharon el escenario montado para hacer uso de la palabra. El primero en hablar fue Matías, hijo mayor del abogado laborista, quien en primera instancia agradeció a un "Quijote que tiene Olavarría" refiriéndose a la periodista Claudia Rafael, a quien reconoció por su importante participación en la causa. A continuación manifestó: "Quiero agradecer a gran parte de la sociedad de Olavarría que por intermedio de sus organizaciones sociales, políticas, sindicales y con una juventud impresionante que tiene, siempre empujaron para que esto se lleve a cabo... Vamos Olavarría". También reconoció a la sociedad tandilense y a sus agrupaciones que a pesar de tener "distinto signo político" trabajaron en conjunto para que el juicio se difunda. Continuó recordando la labor de sus compañeros de la agrupación H.I.J.O.S y sentenció: "La gente de Clarín se tendrá que preocupar porque somos muchos los que tenemos los genes". Manteniendo el mismo tono afirmó: "Mi padre, además de ser esposo, hermano, hijo, amigo, fue sobre todo un militante social y político que asumió la defensa los trabajadores que fallecián sin saber la causa en la fábrica Loma Negra. Hoy encontramos justicia por los autores materiales del asesinato de mi padre, pero vamos a continuar con su legado y no vamos a descansar hasta que no se investigue a fondo el rol de la empresa Loma Negra. Por último sabiendo que las multisectoriales se conformaron por varios grupos políticos me permito una digresión personal, no puedo dejar reconocer y  agradecer a ese flaco desgarbado que vino desde el sur y vive en la inmensidad de nuestros corazones que tuvo los h..... suficientes para derogar las leyes de obediencia debida y punto final, dándonos la posibilidad de presentarnos como querellantes, y hoy tenemos justicia."
 A continuación tomó el microfono Martín, hijo menor de Carlos Moreno, quien se refirió a la juventud que acompañó el juicio diciendo: "Esta región tiene un futuro increíble, estos jóvenes van a ser este país más justo ...Vamos por que se sepa qué sucedió en 'La Huerta', vamos porque se sepa qué sucedió en Monte Peloni", y entre agradecimientos varios aclaró: "Siento que es algo que hemos logrado entre todos que Julio y Emilio Méndez sean los primeros civiles condenados a cárcel común." 

Para finalizar se le pidió a Taty Almeyda, Presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, que tome la palabra. Ésta expresó: "Es otro día histórico, otro día que sinceramente madres, abuelas y familiares por razones de edad no pensamos que podíamos compartir esta justicia que por años venimos exigiendo. Justicia legal, jámas justicia por mano propia." /AC-FACSO