Notas

Balance de la APDH local

Día Internacional de los Derechos Humanos: Avances y retrocesos en el ámbito nacional

Las leyes de medios, de matrimonio igualitario, de identidad de género y los juicios por crímenes de lesa humanidad son algunas de las iniciativas que celebra la delegación en Olavarría de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos. La violencia institucional, los femicidios y la interrupción judicial en la aplicación total de la ley de medios, son algunas de las deficiencias que señalan

APDH ola
La APDH local dejó sentado su balance en un
comunicado público./ Imagen: APDH Olavarría

A 64 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y a 29 años de la recuperación de la democracia en Argentina, ADPH delegación Olavarría celebra ser parte de un proceso histórico a nivel nacional y de ejemplo internacional como son los juicios por crímenes de lesa humanidad a quienes son responsables de la última dictadura cívico-militar en Argentina. Juicios que mantienen viva la memoria y brindan justicia al pueblo argentino. Juicios que también nos devuelven la alegría de sabernos responsables y parte de cambiar la historia.

Esto sumado a un contexto social y político que nos ha permitido avanzar en la ampliación de derechos para todas las personas, cuando los derechos humanos son también celebrar la ley de matrimonio igualitario y de identidad de género; la ley de erradicación de la violencia hacia las mujeres y la creación del registro único de denuncias; le ley de servicios de comunicación audiovisual. Entre otros avances.

Sin embargo, consideramos que las leyes por si solas no cambian las realidades, y para muestra basta lo sucedido la semana pasada con relación a la llamada ley de medios obstaculizada por personal judicial el cual debe garantizar el derecho a la información y a la comunicación a todas las personas; también, hoy, en nuestra ciudad lamentamos una nueva víctima de violencia de género, asesinada por su ex pareja.

Hemos avanzado en nuestro camino y debemos seguir haciéndolo. Porque siguen muriendo personas por violencia policial e institucional; porque los y las jóvenes continúan sin una ley nacional penal propia que garantice los estándares internacionales de protección de sus derechos, quedando a merced de las arbitrariedades del aparato represivo, la justicia para personas adultas y de la violencia del discurso demagógico-punitivo, porque siguen muriendo mujeres por abortos clandestinos; porque los gobiernos provinciales continúan reprimiendo y criminalizando las protestas sociales y con ellas a los grupos más vulnerables, porque no se siga invisibilazando a las personas de pueblos originarios como parte del Estado. Porque un estado de justicia social plena debe ser nuestro horizonte.

El 10 de diciembre en Argentina se ha vuelto un día de celebración, de denuncia y de reflexión para actuar cada día con responsabilidad personal, colectiva e institucional hacia la plena vigencia de los Derechos Humanos.