Notas

Especial Monte Pelloni

Manuela Elizari: “En una relación afectiva pienso que en cualquier momento me van a dejar”

La jornada de audiencias programadas para la mañana del martes se vio acortada debido a la ausencia de tres testigos. El testimonio más importante fue el de Manuela Elizari, hija de Araceli Gutiérrez, que hizo hincapié en el “abandono” y las secuelas psicológicas que le produjo el secuestro de sus padres y la desaparición de sus tíos

La audiencia del martes comenzó con la notificación de que tanto Lilia Josefa Molloy de Gutiérrez como Laura Ledesma Nichea no se encontraban en condiciones de salud para prestar declaración, mientras que la testigo Esther Pereyra de González no pudo ser ubicada. Además se informó que los imputados Ignacio Aníbal Verdura como Omar “Pájaro” Ferreyra continúan internados en el Hospital Municipal.

Araceli escucha el testimonio de su hija acompañada de familiares y anigos. Foto Prensa FACSO.

La primera testigo de la jornada fue Manuela Cecilia Elizari, hija de Lidia Araceli Gutiérrez y Néstor Horacio Elizari. El fiscal Walter Romero fue quien comenzó con la indagatoria y le solicitó que narre sus recuerdos sobre la detención de sus padres. Ella lo hizo de manera muy escueta y durante aproximadamente diez minutos. En ese momento ella tenía dos años y medio y sintió un golpe muy fuerte en su casa mientras varias personas entraron con luces al lugar.

Manuela quedó al cuidado de sus tíos junto a su hermano y vivió toda su vida atormentada por pesadillas en la que el “abandono” es un tema recurrente. Recordó haber visitado a Araceli en la cárcel de Devoto y a Néstor en la unidad N° 2 de Sierra Chica.

Ante la pregunta de cómo marcó la dictadura a sus padres ella indicó que “mi papá quedó muy cerrado, frío, fue muy difícil relacionarse afectivamente con él”. Además narró que en el ámbito familiar les tocó vivir situaciones muy difíciles, como por ejemplo pasar los veranos con sus primos huérfanos (hijos de Amelia Isabel Gutiérrez y Juan Manuel Ledesma).

Además habló de las secuelas psicológicas que le dejó la detención de sus padres. “Tengo pesadillas recurrentes o falta de confianza, pienso que en cualquier momento me van a dejar en cualquier relación afectiva”.

Manuela Elizari narró como la dictadura afectó sus vínculos familiares. Foto: Prensa FACSO.

Los abogados de los imputados no realizaron preguntas y Falcone, presidente del Tribunal Oral Federal de Mar del Plata llamó al próximo testigo: María Haydeé Esnal Durruty quien era enfermera en el Hospital Municipal de Cacharí y fue la que recibió a la bebé recién nacida del matrimonio Ledesma – Gutiérrez, Natalia Anastasia Ledesma.

Ante la pregunta del fiscal Romero sobre qué recordaba, sentenció: “No recuerdo ni el año ni el día, sí que era una madrugada en la que tomaba el turno y llamaron a la puerta, abrí entraron con algo que no sabía lo que era y me pidieron alguna salita con cama o camilla”. Indicó que dejó pasar a un grupo de tres civiles vestidos de traje y no les consultó qué iban a dejar ya que “eso le correspondía a las autoridades del hospital”.

Cuando el grupo de civiles abandonó el lugar, fue a ver qué habían dejado y se encontró con una beba tapada con una cobija. Notificó a las autoridades del hospital sobre el suceso y “desde ese momento no supe más nada, si estuvo ahí dos o tres días no recuerdo ya que tuve algunos problemas de salud y perdí un poco la memoria”.

Luego de diez minutos de testimonio se retiró ya que la defensa no realizó preguntas a la testigo.

Luego de diez minutos de testimonio se retiró ya que la defensa no realizó preguntas a la testigo. Foto: Prensa FACSO.

El último en declarar durante la mañana del martes fue Raúl Oscar Seoane, quien tenía una gomería en Cacharí ubicada en la Ruta 3 km. 233 ubicada a diez cuadras del Hospital de Cacharí e indicó no recordar nada de lo sucedido. Se presume que Seoane atendió en su comercio a los tres civiles que dejaron al bebé en el hospital y luego les habría reparado una goma del vehículo que los transportaba.

Seoane ingresa al recinto acompañado por el centro Ulloa. Foto Prensa FACSO.

Ante esta declaración la fiscalía solicitó que se leyera su declaración en la causa que se llevó a cabo tiempo atrás sobre Natalia Anastasia Ledesma. El presidente del tribunal indicó que no era necesario la lectura y le solicita a Seoane que reconozca su firma en dicha declaración.

Falcone intervino diciendo que “es imposible que el testigo recuerde si en su gomería reparó la goma de un auto puntual en 1977” por lo que no es necesario que Seoane  continúe presente.

El testigo se retiró y el abogado de Leites, Claudio Castaño solicitó al tribunal “no desvirtuar el objeto del proceso a los fines de garantizar la celeridad y la economía del proceso” en referencia a la citación de testigos que nada aportarían a la causa.

El tribunal estuvo de acuerdo y pasó a un cuarto intermedio hasta el mediodía, momento en el que continuarán las declaraciones testimoniales de familiares y allegados de las hermanas Gutiérrez. /AC-FACSO