Notas


Educación y deporte

La convivencia entre la práctica deportiva y el estudio durante la adolescencia

Cada vez son más los jóvenes deportistas en Olavarría que tienen un destacado desempeño en las disciplinas deportivas. La articulación entre el profesionalismo deportivo y la educación secundaria desde la mirada de adolescentes, profesores y directivos

Cuando la escuela secundaria llega a su fin los jóvenes se encuentran ante diversas perspectivas para definir su futuro. Ingresar al ámbito laboral o continuar con una carrera terciaria o universitaria son las opciones más frecuentes. Incluso ambas pueden llegar a coexistir. De todas maneras, hay una tercera alternativa para aquellos adolescentes que practican un deporte de manera semi-profesional o que ya son profesionales. Optar por dedicarse a un deporte es una decisión que presenta ciertos riesgos ya que son muy pocos los que llegan a ser profesionales y pueden vivir de ello. A pesar de todo, algunos deciden continuar con la práctica deportiva y estudiar una carrera.

La convivencia entre estudio y deporte no solo existe durante el período de educación superior sino que transcurre previamente en la escuela secundaria. En Olavarría muchos jóvenes practican distintos deportes y son profesionales de sus disciplinas. Asistir a las competencias a lo largo del país y en el exterior les representa, muchas veces, una demanda económica y tener que dejar la escuela en un segundo plano. Las ausencias pueden llegar a ser de un mes aunque ello no implique que queden libres ya que existe un régimen especial que contempla las "licencias deportivas".

Ignacio Galardo tiene 17 años, concurre a 6º año de la Escuela Nacional Adolfo Pérez Esquivel (ENAPE) e integra el plantel profesional de básquet del Club Atlético Estudiantes que participa en el Torneo Nacional de Ascenso. "Hoy por hoy el básquet tiene prioridad", destaca. De hecho planea culminar la secundaria y continuar con los entrenamientos aunque no descarta estudiar alguna carrera. "La escuela me ha sabido comprender y me ha ayudado mucho" señala Ignacio, con sus más de 2 metros de altura que lo hacen resaltar por sobre sus compañeros. Las inasistencias le hacen perder no solo los contenidos curriculares que se dictan sino también las evaluaciones. Al reintegrarse luego de días de ausencia es consciente que debe ponerse al día con los temas expuestos en clase, con los trabajos que debe entregar y también con las evaluaciones. "Generalmente hablo con los profesores, suelen cambiarme la fecha si justo no estoy en la ciudad", afirma.

Algo similar le sucede a Constanza Martínez, de 17 años, palista del Club Atlético Estudiantes e integrante del seleccionado nacional de canotaje. Actualmente es estudiante de 5º año de la Escuela Nº 4. Hasta 2014 asistió al Colegio Nuestra Señora del Rosario y guarda un grato recuerdo de sus directivos y docentes. "Cada vez que viajaba a un sudamericano entre viaje, entrenamiento y competencia con la selección argentina me iba unos 30 días y al regresar era muy difícil ponerme al día", comenta. "En Rosario algunas profesoras fueron muy comprensivas y me ayudaban mucho. A otras les parecía que tenía que elegir entre la escuela o el deporte, pero por suerte contaba con el apoyo de la directora Sandra Sesto", sostiene.

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La palista Constanza Martínez planea remar y hacer una carrera universitaria, sin importarle el tiempo que ésta le demande. Foto: Gentileza Constanza Martínez.

Sesto, directora del Colegio Rosario, es Profesora de Educación Física y tiene una visión muy positiva sobre la inclinación hacia el deporte. "Quienes hemos sido jugadores y luego entrenadores, sabemos lo valorable que es la práctica deportiva y nos encanta que lo hagan. Pero deben asumir un compromiso con la escuela" afirma. En Rosario, la mayoría de los profesores apoyan a los estudiantes, encontrándose predispuestos a consultas sobre los temas que se dictaron durante una ausencia o fijar fechas complementarias de evaluaciones. Lo mismo sucede en la Escuela Nacional Adolfo Pérez Esquivel. "La licencia deportiva está contemplada en el código de convivencia de la escuela y la normativa de nación y provincia", sostiene Fabiana Caruso, Profesora en Ciencias de la Educación y directora de la ENAPE. Para su justificación, solo es necesario presentar un certificado emitido por la federación u organizador del evento o en su defecto del entrenador.

La decisión de seguir una vida ligada a lo deportivo tiene sus consecuencias y existen cuestiones que deben dejarse de lado como las salidas, los viajes de estudio o el encuentro con amigos. Federico Chingotto, de 18 años, es jugador de pádel y actualmente es Nº 1 del ranking sudamericano Sub 18. Para él, esas cuestiones de las cuales tuvo que prescindir no resultaron un problema. "No sé si me perdí salidas o cosas así porque mi familia siempre me dio la oportunidad de elegir lo que quería hacer. Fue más una decisión mía de no hacer esas cosas y sí lo que me gustaba que es el pádel". Chingotto culminó la secundaria en 2014 y se inscribió en el Profesorado de Matemática que se cursa en el Instituto de Formación Docente Nº22. Si bien su decisión es dedicarse al deporte y en paralelo seguir una carrera, aún no está convencido de que ambas cuestiones puedan coexistir. "Voy a tratar de manejarlo con los viajes a ver si lo puedo ir haciendo", afirma.

Una experiencia similar a la de los jóvenes deportistas vivió María Eugenia Gaite, de 32 años, Profesora de Antropología. Durante su adolescencia se dedicó al atletismo y guarda buenos recuerdos de esa etapa. "Me encantó mi transito por el deporte. Mis amigos eran del entorno deportivo y mantenían la misma rutina que yo: entrenamiento diario, buen descanso y buena alimentación. Nunca me planteé que me perdía algo porque gane muchas otras cosas maravillosas", subraya. Gaite considera que esa dedicación le permitió establecer metas ante los distintos desafíos que se presentaban en su vida. Por ello optó por dedicarse plenamente a su carrera de grado en la Facultad de Ciencias Sociales de la UNICEN y relegar el plano deportivo.

Decisiones y compromisos son las claves para llevar adelante los diversos retos en el ámbito educativo y deportivo. Ante el apoyo de las instituciones educativas, la dedicación profesional a un deporte es posible. Establecerse metas y esforzarse por ellas hará de los resultados algo aún más valioso. /AC-FACSO